Empresarios precoces, la nueva moda

Estamos frente a una nueva generación, la generación empresarial infantil. A temprana edad, los niños empiezan a desarrollar sus habilidades de negociantes, a la hora del jugo ponen en practica todos sus conocimientos en practica. Quien tira la pelota, quien la recoge, yo quiero ese carrito- que tal si yo te doy este otro mas bonito y tu me das ese-, yo soy la mama, yo el que tiene los poderes, etc. Los niños acomodan sus intereses de la mejor manera frente al grupo y los negocian si sus opciones no son favorables; sabes como manipular para obtener sus objetivos. Sin ir muy lejos, cuando se les dice " escoge uno nomas" termina siendo dos, se escuchan sugerencias como " uno mas para mas tarde" o "premio si limpio mi cuarto".
Los chiquilines son creativos, una capacidad de invención enorme, imaginación, poder de convencimiento, grandes estrategas- aplican estrategias para alcanzar acuerdos-; son capaces de coordinarse en el juego y a través de sus propias decisiones aprenden a negociar lo ya acordado.
Pensando en todo este potencial ignorado, y la dificultad a la que se enfrenta estos jóvenes empresarios para presentar sus creaciones e invenciones, Norm Goldstein creo "By Kids for Kids" una empresa que ayuda a los chicos a lanzar sus productos al mercado.
Existen muchas ferias que presentan estos productos pero poco apoyo para la investigación, desarrollo y comercialización de los mismos.
Ellos están mas allá de la "Generación Y", ellos no se dejan asustar por el incremento del social media; solo tienen su creatividad para darle cuerda a cuanta inversión se les cruza por la cabeza. Ni siquiera tienen edad para conducir o votar pero sus inventos generan miles de dólares.


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